En ésta área se trabaja sobre la permeabilidad del barrio a través de los accesos de ingreso y sobre el cierre perimetral (muros, cercos, rejas, etc.). Para ello se combina la seguridad física con la tecnología.
Por lo general en los accesos se trabaja con bases de datos sobre los propietarios, socios, personal de servicios (domésticos, jardineros, servicios permanentes, etc.), personal de obra (listados de autorizaciones y seguros), delivery, personal de mantenimiento particulares, visitas, etc.
Para algunos casos se utilizan sistemas de accesos inteligentes con diferentes privilegios.
Para otros se confeccionan pases temporarios y sectorizados. Acreditación del personal ciento por ciento. Se complementan éstos sistemas con registros fílmicos.
Según criterios y privilegios de cada lugar se revisan los vehículos tanto al ingreso como al egreso.
Los puestos de seguridad deben ser amplios y cómodos, con un sector de acreditación y otro puntualmente de seguridad (generalmente retirados del fácil acceso desde el exterior para evitar ser tomados y puedan activar los sistemas de alarmas).
Generalmente a los propietarios o socios se le reserva un acceso exclusivo para agilizar el ingreso y egreso.
La guardia una vez identificado y chequeadas las autorizaciones de ingreso guía a las personas a través de un pequeño croquis a los lugares de destino.
En ese mismo plano figuran las recomendaciones básicas de seguridad y convivencia del lugar. (Velocidad máxima, ruidos, lugares de estacionamiento, etc.)
Estos sistemas complementados por la implementación de procedimientos estancos y horarios de ingresos hacen de los accesos un sector seguro.
Por otra parte tenemos el cierre perimetral.
Partiendo de los conocimientos básicos de seguridad sobre sistemas de barreras encontraremos muros, cercos olímpicos, ligustros, empalizadas, etc. o naturales como puede ser un arroyo que eviten el ingreso al barrio.